Resumen:
Para la mayoría de nosotros parece natural el dirigirnos a otros con palabras respetuosas, comer con la boca cerrada o el deber saludar a la bandera de nuestra nación. Sin embargo, la Historia nos muestra que lo que hoy se concibe como una práctica invariable, en realidad es resultado de un largo proceso de civilización de la humanidad, en la que los distintos grupos sociales han buscado establecer normas basadas en la moral del momento para regular el comportamiento de las poblaciones. Como resultado de esto, los seres humanos han aprendido a clasificar sus obras en buenas y malas y así otorgar reconocimientos o consecuencias negativas a cada una de ellas.