Resumen:
Tres preguntas dirigen la indagación: ¿cuáles son las competencias lingüísticas y comunicativas que requieren los individuos para la vida profesional en el siglo XXI? además ¿el sistema educativo nacional está ofreciendo educación conducente a que cada alumno alcance dichas competencias? Y, por último, cuestión central de la tesis, ¿el empleo de la literatura infantil y juvenil contribuye a alcanzar dichas competencias?