Resumen:
Los organismos vivos nos encontramos expuestos a una amplia variedad de sustancias químicas de origen natural y sintético, así como a compuestos derivados de actividades antropogénicas. Recientemente, los compuestos disruptores endócrinos (EDCs) han recibido una gran atención debido a los efectos que producen sobre el sistema endocrino. Los estrógenos esteroideos son considerados como disruptores endócrinos y se clasifican de acuerdo con su origen como estrógenosen naturales y sintéticos. En años recientes, la investigación se ha centrado en el estudio del 17α-etinilestradiol (EE2), un compuesto estrogénico sintético que se ha convertido en un problema generalizado de contaminación de ambientes acuáticos debido a su tendencia a (1) absorber materia orgánica, (2) acumularse en sedimentos y (3) concentrarse en la biota. EE2 es el ingrediente activo de los anticonceptivos orales y es usado en la terapia de reemplazo hormonal. El objetivo de esta revisión es brindar un panorama general acerca del EE2, abordando su presencia y métodos de eliminación o degradación de ambientes acuáticos, así como los efectos tóxicos en especies acuáticas. Se ha determinado la presencia de EE2 en ambientes acuáticos que abarca rangos de ng/L a mg/L en diversos países alrededor del mundo. Se han reportado efectos tóxicos en la fertilidad y la reproducción y promoción de la feminización e inducción de la vitelogenina (VTG) en peces machos adultos expuestos. Entre los métodos empleados para la eliminación o degradación de EE2 de los ecosistemas acuáticos destacan métodos físicos, químicos y biológicos, siendo estos últimos los más utilizados.