Resumen:
Se presenta una investigación etnográfica realizada con estudiantes con discapacidad de la alcaldía de Iztapalapa, Ciudad de México. El propósito fue describir algunas prácticas de medicalización que han originado que esta población escolar ingiera psicofármacos como una parte naturalizada de la intervención psicopedagógica. Se concluye que la medicalización es un proceso en el cual las personas con discapacidad son más susceptibles, debido a la persistencia del modelo médico en el abordaje de la discapacidad y su intrincada relación con la potente industria farmacológica.