Resumen:
El presente artículo aborda el tema de cuatro mapas generales de México fechados en la década de 1860, en el contexto de la intervención francesa. Estos materiales poseen características similares en su diseño, aun cuando fueron producidos en circunstancias políticas específicas. En el texto se muestran los componentes esenciales de su estructura y, en lo posible, las fuentes de las que se valieron los autores para su construcción. Entre los asuntos más trascendentes que muestran dos de ellos está la división territorial del país en la etapa republicana, y en los otros, el fraccionamiento geográfico de México en 50 unidades departamentales, propuesto durante el Segundo Imperio.
El interés por estudiarlos surgió no solo por sus características, sino para comprender su significado en cuanto su ser como documentos, es decir, para destacar el mensaje transmitido mediante el estudio y la disposición de los signos, en relación con el entramado político en el que se generaron.