Resumen:
El glioblastoma es un tumor cerebral agresivo con una sobrevivencia media menor de dos años. Las terapias actuales no siempre logran mejorar el pronóstico y tienen diversos efectos adversos. En estudios recientes, se ha descrito el papel de los micronutrientes en cáncer; compuestos como ácidos grasos, vitaminas y elementos traza, poseen una actividad moduladora en diferentes procesos celulares y debido a que en los pacientes oncológicos es común el consumo de suplementos alimenticios, es importante conocer que efectos tienen sobre el desarrollo de cada tipo de cáncer.
Las vitaminas hidrosolubles del grupo B, como piridoxina y cobalamina, son esenciales en el desarrollo y mantenimiento del sistema nervioso. Estudios previos describen que la piridoxina y la cobalamina tienen impacto sobre la proliferación celular y apoptosis en diversas líneas celulares neoplásicas.
En este estudio, se evaluó el efecto de la suplementación con piridoxina y cobalamina en la viabilidad de la línea celular de glioblastoma humano U87-MG, mediante el ensayo con cristal violeta. Complementario a esto, se realizó un ensayo de tinción de ADN con yoduro de propidio para evaluar el ciclo celular. Se evaluó la expresión de las proteínas Bcl-2 y caspasa 3 activa mediante western blot, posterior a la suplementación, y la expresión intracelular de caspasa 3 activa se comparó con células no tratadas mediante citometría de flujo.
Los resultados demuestran que la piridoxina disminuye la viabilidad celular de una manera dependiente de la concentración y del tiempo, mientras que este efecto no se observó para la cobalamina. No se observó arresto del ciclo celular y la expresión de Bcl-2 no fue significativamente modificada por la suplementación con estas vitaminas. La expresión de la caspasa 3 activa aumentó posterior a la suplementación con piridoxina, pero no con cobalamina. Por tanto, la suplementación con piridoxina podría potencialmente inducir la apoptosis en las células de glioblastoma.