Resumen:
Entre los babyboomers y los centennials la visualidad en juego es extraña, no es posible elegir puntos de vista radicales sino gustos que hasta ahora se han designado despectivamente como posmodernos. Para profundizar en las circunstancia de un miembro de la Generación X, propongo reflexiones a partir del cine de terror. Con la teoría freak planteo observaciones a algunos de los innumerables estilos del cine de terror, hablaré de el cuerpo raro. Primero mediante lo que he denominado manifestaciones estéricas (estética-histeria), remitiéndome al análisis de Mark Fisher de lo interior y lo exterior por considerar que ambos conceptos se crean en esa cuestión autorreferencial corporal, empleando imágenes de los conceptos más clásicos: lo súper natural y lo obsceno- escatológico. Luego, apelaré a lo extrínseco de las escenas o atmósferas estétricas (estética-tétrico) para casos con características no corporales, ya que aún cuando los efectos de la realidad y lo que denominamos mundo, terminan de alguna manera en la conformación psíquica, estos presentan mayor evidencia de otras cualidades para el conocimiento de lo real. La mención multi especie planteada por Donna Haraway, que recupera en mucho el mundo del horror y “la fantasía”, es un ejemplo de ello y fue una inspiración experimentada en este texto mediante el desdibujo del concepto de La Estética: estérica y estétrica sus resultados. Danzar macabramente con Mark Fisher con la intención de ampliar los caminos hacia la muerte.