Resumen:
La presente investigación tiene como objeto analizar las novelas Ahora me rindo y eso es todo (2018), de Álvaro Enrigue, y Desierto sonoro (2019), de Valeria Luiselli. Ambas comparten una importante serie de características: fueron escritas por un mexicano de ascendencia europea radicado en Estados Unidos; cuentan el viaje de una familia desde Nueva York hasta Arizona, con dos hijos pequeños; se desarrollan parcialmente desde la autoficción; la fecha en que fueron escritas se ubica entre 2014 y 2018, y estas son también las fechas en que se desenvuelve su respectivo relato. Además, ambas critican las políticas que Estados Unidos (y México, en menor medida) establecieron en contra de dos grupos minoritarios: los últimos apaches libres y los niños migrantes centroamericanos, respectivamente. El objetivo de este estudio es, primero, proponer una lectura sobre cómo estas novelas construyen la imagen de su respectivo grupo vulnerable despreciado en Estados Unidos (y que, en consecuencia, desempeña la posición de otredad); segundo, mostrar cuáles son los intereses de cada narrador y qué papel desempeñan, en su forma de construir el relato, apaches y migrantes; y tercero, ofrecer una interpretación para la forma autoficticia en que están escritas.