Resumen:
En las últimas décadas, las economías emergentes han ganado relevancia en los mercados financieros internacionales debido a su crecimiento económico sostenido y mayor estabilidad macroeconómica. Esto ha aumentado la confianza de los inversores internacionales y ha llevado a una mayor inversión extranjera. Sin embargo, estas economías dependen en gran medida del financiamiento externo y enfrentan riesgos relacionados con una apertura comercial y financiera desregulada. El diferencial de rendimiento de los bonos soberanos se ha convertido en un indicador clave de riesgo país, siendo medido principalmente a través del EMBIG. Un diferencial alto indica un mayor riesgo percibido por los inversores, lo que puede aumentar los costos de financiamiento y reducir el crecimiento económico. Este estudio busca determinar el peso específico de los factores internos frente a los externos que influyen en el nivel de riesgo país de cinco economías latinoamericanas (Brasil, Colombia, México, Perú y Ecuador) durante el periodo 2000 – 2021. Se emplearon modelos econométricos de datos de panel para examinar tanto la variabilidad entre países como la temporal en los diferenciales de bonos. Los resultados destacan la importancia de factores macroeconómicos locales como, la deuda externa y pública, las reservas internacionales, la inflación, el tipo de cambio efectivo real, el saldo en cuenta corriente y la apertura comercial. Además, se observa que factores globales, como el índice de volatilidad VIX y las tasas de bonos del gobierno de Estados Unidos también influyen en los diferenciales. Finalmente, el estudio muestra que mantener fundamentos macroeconómicos sólidos es esencial para reducir los diferenciales soberanos y lograr un menor costo de capital en economías emergentes latinoamericanas.