Resumen:
Esta obra analiza espacios rurales territorialmente situados, mediante enfoques y posturas de varias disciplinas. La interdisciplina de los estudios rurales se establece a través del enfoque socioespacial, representaciones analíticas y operacionales, las cuales cohesionan la escala, los procedimientos deductivos-inductivos e interpretativos, el procesamiento de los datos de fuentes institucionales, la observación de campo, los ordenamientos legislativos y la literatura para abordar las formaciones adaptativas que resultan de la confluencia de factores materiales e inmateriales.
Descripción:
Esta obra analiza espacios rurales territoriales situados, mediante enfoques y posturas de varias disciplinas. Por ello, en la primavera parte del libro, se expone el marco cognitivo de los conceptos que articulan el enfoque socioespacial. Las representaciones analíticas y empíricas (espacio, fractal, espacio geográfico, territorio, región y lugar) establecen los niveles de estudio para analizar los espacios rurales. Las sinergias regionales y locales se exploran en la segunda parte, porque las interacciones de las estructuras sociales condicionan y controlan las formas económicas, de vida y de trabajo. Con ello, la configuración fractal del sector agropecuario regional, a través de indicadores, caracteriza la situación coyuntural de las estructuras agrarias de los ejidos, de las comunidades y de las unidades de producción agropecuarias y forestales.
Por lo anterior, se concluye que las sinergias adaptativas no tienen un significado unívoco, pues la distribución y la concentración de los medios de producción, los beneficios selectivos para los individuos, los grupos y los impactos ambientales negativos de la tecnología agropecuaria acotan los alcances del desarrollo rural sustentable, el fortalecimiento del sistema agroalimentario y el bienestar social.