Resumen:
Para reconocer la problemática que existe en nuestro país respecto al manejo de cualquier tipo de residuo, primero es importante tomar en cuenta el aumento de su generación. Su incremento responde a múltiples factores, tales como el crecimiento demográfico y urbano desorganizado, el desarrollo industrial, las modificaciones tecnológicas, pero sobre todo el cambio constante de los patrones de consumo de la población.
La realidad respecto al manejo de la mayoría de los residuos es devastadora pues México no cuenta con la infraestructura adecuada y suficiente para llevar a cabo el servicio de recolección, transporte, tratamiento y disposición final de los residuos de manera óptima.
Descripción:
Los Residuos Peligrosos Biológicos-Infecciosos (RPBI) derivados de la emergencia sanitaria causada por la transmisión de la COVID-19, principalmente son generados a escalas locales debido al confinamiento que atiende la población en general, muchos de estos residuos son generados desde los hogares y carecen en su mayoría de un manejo óptimo y reglamentario, en todos los momentos que conforman su manejo.
Por lo cual, el manejo inoportuno de los RPBI a escalas locales, en especial desde las fuentes generadoras (hogares, oficinas, centros comerciales, hospitales, escuelas, entre otros) podría generar el incremento de riesgos, mismos que son establecidos por la Ley General para la Prevención y Gestión Integral de los Residuos (LGPGIR) (2003), en su Artículo 5, como: la probabilidad o posibilidad de que el manejo, la liberación al ambiente y la exposición a un material o residuo, ocasionen efectos adversos en la salud humana, en los demás organismos vivos, en el agua, aire, suelo, en los ecosistemas, entre otras cosas.