Resumen:
La presente investigación tiene como propósito recuperar la ética de Schopenhauer, considerándola como una interpretación de lo existente, haciendo comprensible en conceptos el ser del mundo que se expresa en cada uno de modo concreto, como vivencia o sentimiento. Sostenemos que la ética schopenhaueriana se puede interpretar como una hermenéutica en tanto que esclarecimiento o desciframiento del actuar, a fin de comprender el mundo. Exponemos que Schopenhauer inicia la fundamentación de su ética estableciendo un requisito indispensable: la ética debe ser capaz de mover por sí misma al hombre a conductas moralmente valiosas. Por lo que el fundamento de la ética tiene que ser algo que requiera poca reflexión, y desde luego, poca o nula abstracción. El fundamento ha de basarse en la comprensión intuitiva e imponerse inmediatamente a partir de la realidad de las cosas. Dicho fundamento no es otro más que la compasión. Ésta es participación inmediata e instintiva en el sufrimiento ajeno, es la única fuente de las acciones que pueden tener genuino valor moral, pues han expulsado de sí todo motivo egoísta. La compasión supone que uno, en cierta medida, se ha identificado con el otro y que, por ende, la barrera entre el yo y el no-yo se ha eliminado eventualmente, sólo así el asunto del otro, su necesidad, su carencia, su sufrimiento, se convierten en propios. Finalmente, enfatizamos que la ética en Schopenhauer no sólo es un componente o elemento más, sino el sentido último de su filosofía.