Resumen:
El presente trabajo, tiene como objetivo dar a conocer los resultados de la investigación participativa a través del método llamado fotovoz, que se enfocó a identificar algunas violencias estructurales y la violencia de género que atraviesan a las juventudes de la Escuela Preparatoria Oficial Nº 108, ubicada en San Simón de Guerrero, en el sur del Estado de México. San Simón de Guerrero, es un municipio rural con una economía sustentada en actividades primarias y en comercio minorista.
Las juventudes son actores sociales a los que actualmente se presta mayor atención, aunque tal vez no la suficiente, se les reconoce como parte fundamental del sistema educativo y de la fuerza laboral, del presente y futuro. Dos aspectos a resaltar en los estudios recientes sobre juventudes, primero, es que ahora las juventudes no son analizadas como un ente homogéneo, por el contrario, se reconoce su diversidad, y segundo, tiene que ver con las circunstancias sociales, económicas y culturales, adversas para la mayoría de las juventudes, lo que impacta sus formas y planes de vida.
Las juventudes rurales, tal vez de manera más clara que las juventudes urbanas, experimentan diversas violencias estructurales, ya que en las comunidades o en los territorios donde ellos viven hay obstáculos para el acceso a derechos sociales y a servicios básicos que limitan de diversas formas su cotidianidad y sus planes de vida. Las autoridades gubernamentales locales no se ocupan suficientemente de proporcionar servicios básicos para cubrir las necesidades de las juventudes, lo que genera desigualdades de diversos tipos, desde las territoriales, las de estrato socioeconómico, las de género, entre otras.