Resumen:
Interpretar nuestro mundo a través de las experiencias, es un continuo
esfuerzo de no obviar, aun cuando muchas de éstas son transmitidas en
interacción y desde la socialización: para quienes vivimos las ciudades,
intuimos que éstas nos significan.
A toda persona que le intriguen las ciudades, sus modos de hacer, de ver y
principalmente les interese transitar las peripecias del oficio de quien investiga,
esta investigación podría interesarle. Una ciudad investigada, es siempre más
de lo que contiene, es lo que escapa de ella, es una vasija desbordada donde
se llevan a cabo prácticas socioculturales, comunicativas y políticas. Es el
escenario que nos permite integrar un análisis sobre los discursos e imágenes
que de ella derivan, que en ella conviven.
Toluca, ciudad que resiste al estatus-quo, de cuyo entramado social con
tendencias políticas marcadas, emergen problemáticas de habitabilidad, retos
de movilidad, disputas por el uso del espacio denominado como público y el
ebullir de una urgente agenda feminista, se nos presenta como un territorio
observable y resonante.
Así, de la anarquía de la vida diaria, al acontecimiento (De Certeau, 2000), la
presente realiza un esfuerzo por poner sobre la mesa de discusión asideros y
senderos metodológicos que permitan poner al centro la Comunicación como
disciplina útil para observar una ciudad, quienes le participan, quienes en ella
se enuncian y denuncian, quienes forman el gran relato de las relaciones que
le atraviesan.