Resumen:
La actual Facultad de Humanidades, cual árbol frondoso dando frutos, ha crecido desde las hondas raíces del Instituto Literario del Estado de México, creado por Decreto del Congreso estatal el 3 de marzo de 1828. En las siguientes décadas del siglo XIX hay constancia de los estudios literarios y humanísticos que se impartían en el Instituto, así como de estudiantes humanistas que llegarían a destacar en el ámbito nacional e internacional, como Ignacio Manuel Altamirano. El modesto origen social de Altamirano, que fue becario del Instituo, nos recuerda que la Facultad de Humanidades sigue cumpliendo con una de sus objetivos esenciales: favorecer la movilidad social, a la par que la libertad de crear y pensar, la capacidad de escribir, analizar y reconstruir la historia social y cultural, contribuyendo a crear un mejor país, a través del trabajo de sus egresados.