Resumen:
El 24 de junio de 1830 los legisladores del Estado de México decretaron la transferencia de todo el gobierno estatal a Toluca. Las capitales provisionales de Texcoco y Tlalpan no resultaron exitosas y con el modelo político federalista en la mesa el desarrollo de urbanización de Toluca fue la mejor opción para albergar las arcas estatales. El mercado de abasto fue una de las soluciones obligatorias para reactivar la economía a través de las contribuciones hacendarias.
El México independiente y sus distintos retos, sobretodo políticos y económicos fueron una problemática, principalmente, la decisión de qué tipo de gobierno regiría al territorio y las políticas económicas que se implementarían para retomar el crecimiento comercial. Durante la colonia, uno de los pilares principales para el flujo y sostenimiento de la economía fue la minería, posterior al movimiento de independencia fue necesario pensar qué proyecto político y económico seguiría la nueva nación.