Resumen:
Este es un estudio de corte cualitativo con un diseño fenomenológico que busca conceptualizar el papel de la mujer en la cocina haciendo énfasis
en los elementos históricos que han llevado a que hoy en día, la gastronomía
sea todavía una profesión liderada por hombres. A través de este trabajo, se
logra identificar que al igual que muchas otras profesiones, la historia de las
mujeres en la cocina tiene un fuerte componente de machismo prevaleciendo
un marcado estereotipo de género que, mientras en el ámbito doméstico la
cocina históricamente se ha asociado a la mujer, los restaurantes y la alta cocina
sigue siendo un mundo de hombres. Concluyendo que, poco a poco las mujeres
van ganando espacios en todas las profesiones por lo que, probablemente muy
pronto encontremos más nombres de chefs mujeres en el escaparte nacional
y mundial.