Resumen:
Uno de los grandes problemas que atañen a la sociedad a nivel mundial y de manera especial en las ciudades, es la contaminación de los residuos sólidos por su impacto en los recursos naturales del suelo, aire y agua, por ende, en la repercusión de la salud humana y en los altos costos financieros que implica su manejo. Esta situación se vuelve más compleja en algunos lugares, por el volumen creciente de los residuos y la toxicidad de ciertas sustancias que contienen éstos.
De manera particular, la situación de los residuos sólidos urbanos en México muestra una serie de datos que indican la necesidad de actuar en la gestión de estos. La SEMARNAT (2020) señala que a nivel nacional se recolecta el 83.87% de los residuos sólidos urbanos y en el Estado de México el 74.13% es decir, el resto se encuentra disperso en laderas, ríos o se queman, además, que lo recolectado, no siempre se le da un tratamiento sanitario adecuado, pues la mayoría se destina a sitios no controlados sustentablemente.
Descripción:
Asimismo, a nivel nacional del total recolectado solo el 5 % se recoge de manera clasificada según tipo de residuos, es decir, la mayor parte se encuentra mezclada, esto complica la selección de residuos susceptibles a aprovecharse y muestra deficiente interés en clasificarla. Según su peso y origen se clasifican en 46.42% son residuos orgánicos, el 31.54% residuos susceptibles a aprovechar y el 22.03% son otros residuos, cabe destacar que entre este último se encuentra el pañal desechable ocupando un importante porcentaje de 6.75%. SEMARNAT (2020), el cual requiere disponerlo en un sitio controlado, pero también se muestra que casi la mitad del total es orgánico, lo cual es inconcebible que se mezcle, pues existen diversas alternativas para tratarlo y evitar incrementar el volumen.