Resumen:
La segunda edición de Cuautitlán en la trayectoria de México constituye una doble convocatoria. Celebrar que nuestro municipio con historia y de vanguardia cumple 200 años como parte del México independiente. ¡Celebremos en el conocimiento de nuestra historia! La etapa prehispánica y la colonial posee sendos misticismos, desde el culto a Comaxtli y a 24 Tlatoanis, hasta el impacto de la fe católica como mayor caracterización municipal, la ruta de San Juan Diego Cuauhtlatoatzin. El siglo XIX fue marcado por la productividad de las haciendas, cuyos monumentales vestigios impactan hasta nuestros días. El siglo XX testificó la evolución dinámica del patrón territorial agropecuario al urbano, nació así al Cuautitlán obrero. El siglo XXI ha visto la continuación del proceso evolutivo hasta la nueva vocación urbana: los centros logísticos. El quehacer político-administrativo contemporáneo es modelo de alternancia política. El pueblo de San Mateo Ixtacalco es paradigma de perseverancia por la lucha sobre sus límites y el uso del suelo.
En general, es posible proyectar una política cultural con sentido vanguardista. No obstante, esa proyección debe resolver algunas controversias. Sobre el Cuautitlán prehispánico, algunos estudios recientes han encontrado anacronismos y omisiones en los Anales de Cuauhtitlan. De la etapa colonial, se deben entender las afectaciones indígenas del proceso de evangelización. El simplismo de la vida municipal del siglo XIX es aún una caja negra. Lo mismo sucede con los impactos industriales, urbanos y globales de los siglos XX y XXI. El caso de San Mateo Ixtacalco merece el estudio de su vigencia y, en su caso, su modelación y difusión. Las élites gobernantes, más allá de la alternancia política simplista, deben resolver decididamente las reglas sociales, económicas y burocráticas. Finalmente, la política cultural debe pugnar por la preservación del patrimonio físico y ambiental antes que el deterioro nos gane, así como documentar la cultura popular contemporánea. A partir de este libro, establezcamos la gobernanza cultural de Cuautitlán, nuestro municipio con historia y de vanguardia.