Descripción:
Pocos son los escritores que a la par de su trabajo artístico literario proponen una metodología, una dialéctica entre el artista y la realidad, postura que a su vez se confronta con una expresión popular: “el lado moridor”; por lo que más allá de una aplicación filosófica a la literatura, pretenden establecer nuevos caminos para dentrarse en el campo literario.
En diferentes tiempos y espacios, las artes en general han sabido captar el sentir del ser humano: alegría, sufrimiento, dolor, placer; de manera que artes, ciencias e imaginario popular han creado medios para plasmar esos sentires, los cuales se convierten en valiosos testimonios de vida.
De manera especial, la literatura ha abrevado tales circunstancias y las troca en originales obras de arte, en las que la realidad cobra vida y se refracta a través de personajes, mujeres y hombres, que se vieron envueltos por las circunstancias sociales ya que, de todas las bellas artes,
“la literatura es influida por la existencia social e influye, a su vez, sobre ella, en interminable juego dialéctico de acciones recíprocas, de fuerzas contrapuestas” (Portuondo, 1976: 391)