Resumen:
Gilberto Owen s un poeta católico, pero del tipo que -en palabras de Zaid- no encaja en los cliches de la cultura Católica. Owen es católico pero antes es poeta. O mejor dicho, por encima de todos sus filiaciones, Owen es poeta y es la poesía a quien se consagra, proceso en el que entreteje sus pasiones mitológicas, como es el caso de algunos temas y figuras bíblicas.