Resumen:
Proponer desde la Licenciatura en Educación para la Salud un curso dirigido a los adolescentes para prevenir el contagio de VIH. Antecedentes: La Organización Mundial de la Salud (OMS) calcula que cerca de 2.6 millones de personas viven con VIH en las Américas: de acuerdo con lo anterior, se estima que 1.3 millones de personas viven infectadas en América Latina, 360.000 en el Caribe y cerca de un millón en América del Norte. La Organización Panamericana de la Salud (OPS) indica que el SIDA representa para nuestro país un problema de salud pública emergente que afecta a diversos grupos poblacionales y su distribución territorial es variada a la vez que tiene severos impactos en la esfera biológica, psicológica, social, ética, económica y política. Una de las primeras causas por la que la enfermedad se comenzó a propagar fue debido a la migración que existe entre diversos países, mediante el cambio de pareja y las prácticas sexuales sin protección. Existe también una influencia de la comercialización de las drogas y el abuso en el consumo de estos productos sobre todo en los estados del norte del país. La juventud ha de saber cómo protegerse y debe tener los medios necesarios para ello, estos medios incluyen preservativos para prevenir la transmisión sexual del virus y agujas y jeringuillas limpias para quienes se inyectan drogas. En la actualidad, entre los jóvenes, solo el 36% de los hombres y el 24% de las mujeres tienen conocimientos amplios y correctos para protegerse contra el virus. Metodología y material: fue una investigación de tipo prospectiva, transversal y propositiva ya que se identificaron los factores psicosociales que influyen en el contagio de VIH, se aplicó un instrumento de 62 preguntas, el instrumento se aplicó en una sola ocasión para identificar los diferentes factores psicosociales que influyen en el contagio de VIH en los adolescentes. Resultados: se identificó que los principales factores que influyen en el contagio de VIH en adolescentes es el consumo de sustancias psicoactivas, las múltiples parejas sexuales, el poco uso o uso inadecuado del condón, la autoeficacia para el uso del condón y la discriminación que origina el estar contagiado de VIH, así mismo se identificó que los adolescentes cuentan con los conocimientos sobre el contagio del VIH. Estos resultados obtenidos permitieron diseñar un curso de prevención desde la Licenciatura en Educación para la Salud para prevenir el contagio de VIH. Conclusiones: para diseñar y ejecutar programas de Educación para la Salud sobre los factores psicosociales que influyen en el contagio de VIH, es necesario considerar los conocimientos que tienen los adolescentes sobre el VIH así como las vías de información con las que cuentan. Al hacerlo, se deberá conjuntar esta información y diseñar los programas, mismos que ampliarán la mirada ante la prevención de la enfermedad, al retomar aspectos sociales, aspectos preventivos, aspectos biológicos y aspectos pedagógicos.