Resumen:
La UAEM en el año 2004 cambió la estructura de los programas de estudio de las carreras que oferta a un sistema flexible por créditos, el cual se describe en el presente estudio en cuanto a sus características estructurales y operativas, este cambio se realizó dentro de un marco conceptual educativo del constructivismo, que vino o viene a sustituir al conductista. A simple vista parece que algunos aspectos no fueron contemplados dentro de esta transformación, uno de ellos sin duda fue la planta física de los espacios educativos con que a esa fecha contaba la UAEM. Todos sus edificios estaban concebidos bajo el enfoque conductista, con planes de estudio estructurados de manera rígida que al transformarse en flexible requirieron de repente características diferentes a las existentes; la primera y más evidente fue la capacidad de servicio, al ser un plan flexible se ofertaron unidades de aprendizaje en mayor cantidad ya que el plan de estudios así lo permite, además de que los periodos de estudio desaparecen, al menos académicamente como pares y nones, pudiéndose abrir prácticamente siempre, lo que implica más aulas para más unidades de aprendizaje simultáneas. Sin descontar que un sistema de educación constructivista requiere de una participación más activa de docentes y alumnos en el proceso de “construcción” del conocimiento, con este antecedente las preguntas son:
• ¿Se requiere de nuevos espacios educativos que permitan desarrollar este modelo pedagógico?
• ¿Las escuelas deben seguir contando con los mismos programas arquitectónicos?
• ¿Las aulas, laboratorios y talleres deben seguir siendo como hasta la fecha?
El edificio escolar ha tomado las formas que mejor se han adecuado a las tendencias educativas en boga, proporcionando espacios para aulas, administración, juego y servicios, sin dejar de lado que cada vez es más necesario considerar, a parte de los del diseño arquitectónico propiamente dicho, los aspectos ecológicos y sustentables que han hecho del espacio educativo construido un medio en sí mismo de educación y formación.
A partir de estas premisas se desarrolla un trabajo de investigación que analiza primeramente la evolución de la educación pública en México, pero sobre todo el modo de cómo la arquitectura ha respondido a estas formas oficiales de educar. Con el apoyo de un análisis normativo se plantean los requisitos y requerimientos que aplican en el diseño de espacios académicos.
El estudio continúa con el análisis del estado actual de diversos espacios educativos, lo que permite contar un panorama de la infraestructura académica, así como identificar las tendencias hacia dónde va el diseño y construcción de este tipo de espacios. Se desarrolla un modelo de investigación arquitectónica que lleva a la obtención de valores e indicadores de diseño. Es a partir de este planteamiento que se propone la elaboración de una serie de pasos y acciones (metodología) que al ser tomados en cuenta en el diseño de los espacios educativos, propiciarán que éstos cumplan de mejor manera los requerimientos actuales y futuros que les son demandados. Así mismo se estudian los espacios administrativos y complementarios como bibliotecas, auditorios y cafeterías que integran los planteles educativos de la UAEM
Es a partir de estos análisis que se desarrolla la propuesta arquitectónica del Espacio Educativo Flexible, a partir de la definición de un módulo de diseño, se generan espacios unitarios, con ellos se establece un módulo básico de diseño y se generan sus crecimientos, tamaños, capacidades, así como sus características constructivas, éstas últimas referidas siempre a la obtención del confort físico de los usuarios de este tipo de edificios.
Finalmente se presentan cuatro proyectos elaborados a partir de la información generada en este documento; tres ya construidos y el cuarto solamente a manera de proyecto, donde a manera de comprobación de las conclusiones se verifica el cumplimiento y las deficiencias que se encontraron en las experiencias arquitectónicas presentadas.