Resumen:
El impasse que se siente en nuestro país y a nivel mundial tiene diversas causas, su complejidad es la que me motiva a realizar esta investigación, que pretende ir más allá del rigorismo académico y científico con la transdiciplinariedad, ésta que posibilita el diálogo con el conocimiento que el cientificismo desterró al infierno de la subjetividad. Por primera vez en la historia, la transdiciplinariedad logra que lo objetivo se encuentre con lo subjetivo en otras dimensiones cuánticas, donde al parecer todo es posible. Lo que me permitió recuperar la fuente originaria de la ética en la filosofía hermética. Al respecto es importante pensar ¿Por qué es posible considerar a la filosofía hermética como fuente de la ética originaria que –aquí- se propone? ¿Existe la posibilidad de que el principio de correspondencia del hermetismo aluda al micro y al macrocosmos (mundos cuánticos)?
Descripción:
La sentencia de Heráclito dice algo tan simple que en ella se revela inmediatamente la esencia del reza así y se suele traducir de esta manera: “Su carácter es para el hombre su demonio”.1 Esta traducción piensa en términos modernos, pero no griegos. Pensemos como griegos, el primer término significa estancia, lugar donde se mora. La palabra nombra el ámbito abierto donde moran los seres humanos. Lo abierto de su estancia deja aparecer lo que le viene reservado a la esencia humana y en su venida se detiene en su proximidad. La estancia del ser contiene y preserva el advenimiento de aquello que toca a los humanos en su esencia.