Resumen:
Según la UNESCO (2005a) la diversidad de las modalidades de acceso al conocimiento constituye una de las características más importantes de la sociedad del aprendizaje y supone también, entre otras cosas, el cuestionamiento de los conceptos de inteligencia en los que prevalecía el carácter estable de los procesos de evaluación y trasmisión de los conocimientos. Así, en el contexto de la realidad actual, la tarea de discriminar información se vuelve un proceso casi imposible, la creciente información actual, principalmente por vía Internet, le resulta al pensamiento humano cada vez más difícil de filtrar, tratar y dominar; lo cual se traduce en barreras (número ilimitado de fuentes, desconocimiento de los mecanismos de filtrado, organización o apropiación cognitiva de la información) que impiden hacer un uso efectivo de ella. Así, el exceso de información no significa mejor comprensión de la realidad, sino que con frecuencia alarmante produce el efecto contrario (UNESCO, 2005a; Dudziacck 2003; Sahagún, 2004, citados por Peña, 2011).
Descripción:
En cuanto al uso de los conceptos para organizar el conocimiento, Hjorland indica que éstos son concebidos como unidades de pensamiento, y la relación interconceptual es un elemento fundamental ya que los paradigmas, con sus teorías y conceptualizaciones, son por naturaleza instrumentos clasificadores de la realidad con la que interactúa de continuo el individuo. De esta forma, las relaciones semánticas que se establecen entre los conceptos son básicas para sistematizar el conocimiento, pero su significado queda sujeto a la perspectiva teórica desde la cual sean considerados.