Resumen:
Las células gliales han sido poco estudiadas en la comunicación y el procesamiento de información del sistema nervioso (SN), debido a que han sido consideradas durante mucho tiempo como simples elementos de soporte estructural de las neuronas. Sin embargo, en los últimos años numerosos estudios han implicado a las células gliales en diferentes procesos requeridos para el funcionamiento adecuado del sistema nervioso, siendo de ésta manera compañeras interactivas de la actividad neuronal, regulando múltiples procesos que permiten una mayor plasticidad del sistema nervioso. En estos artículos de revisión se detallarán interacciones o, como bien es señalado “comunicaciones” entre las neuronas y los diferentes tipos de células gliales del SN. De esta forma, y dentro de un contexto contemporáneo del funcionamiento del SN, ya no es apropiado considerar solamente conexiones neurona-neurona (sinapsis), es necesario desarrollar una visión mucho más amplia y compleja; en la cual el SN, debe ser considerado como una intrincada red de conexiones activas entre neuronas y células gliales así como, entre células gliales y neuronas, convirtiéndose en un paradigma que nos permite replantearnos la integración del funcionamiento del SN, tal es el caso de la interacción de los astrocitos y las sinapsis neuronales, estableciendo una transmisión sináptica.
Descripción:
El sistema nervioso (SN) es un tejido complejo formado por un conjunto de células que conforman una red altamente organizada de comunicación y procesamiento de información. El SN recibe información del medio ambiente, la cual se procesa para posteriormente emitir una respuesta apropiada, algunas de estas respuestas se realizan en milisegundos como lo es un reflejo que es una respuesta automática y otras necesitan de un tiempo mayor de respuesta, como lo es el aprendizaje, que requiere de una cooperación y comunicación de diversas regiones del cerebro. No obstante, la tarea principal del SN es asegurarse de que el organismo se adapte adecuadamente al medio ambiente, para que este lleve a cabo sus funciones vitales y reproductivas.