Resumen:
La planeación de las tecnologías de la información y comunicación (TIC's) en las instituciones educativas ocupa un importante lugar en las políticas educativas dentro de la implementación de la evaluación de la gestión en Sistemas y es tomado muy en cuenta por parte de los directivos y del conjunto de actores involucrados.
Este cambio, también puede verse en otros aspectos de las políticas de implementación de las TIC's. En los primeros años del presente siglo se presentaban con mayor fuerza las decisiones relacionadas con el equipamiento de las escuelas y, más adelante, con la conectividad. Pero hoy en día la evidencia demuestra que la inversión en equipamiento, conectividad y software adecuado no garantiza que los alumnos en las instituciones educativas accedan al potencial que estas herramientas brindan.
A partir de estas experiencias se puso en evidencia la necesidad de que los equipos directivos cuenten con un marco de referencia respecto a la inclusión de las TIC's en los centros. No se trata, por cierto, de que los directores sean expertos en tecnologías, sino de que puedan planear los diferentes procesos que se desencadenan cuando las TIC's llegan a las instituciones, de modo que éstas se encuadren dentro de un proceso de innovación tecnológica. Se necesita de una herramienta de planificación para la integración de las TIC's en la institución escolar que, a modo de camino a seguir, presente la doble finalidad de permitir la elaboración de un estado de situación inicial, y además, de orientar el proceso de cambio mostrando posibles pasos a dar en función de los objetivos trazados.
Descripción:
La información es importante debido a que es un recurso principal que poseen las organizaciones actualmente y por ello es fundamental que su manejo se haga de forma segura, eficiente y eficaz, de manera que pueda ser útil y contribuya a mejorar el proceso de toma de decisiones, de coordinación de actividades o acciones operativas, además de permitir adoptar e implementar controles sobre dichas actividades. Para que estos procesos sean lo más acertado posible, la información debe ser de calidad, es decir, debe estar libre de errores, estar disponible en el momento oportuno y ser relevante en relación a Jo que se necesita (Ramos, 1998).