Resumen:
Los problemas de salud asociados a la pérdida de tejidos o al fallo funcional de órganos son casos médicos más frecuentes de lo que se pudiera percibir e incluso mortales cuando no son tratados adecuadamente; además, representan costos elevados en la atención para el sistema de salud, para el propio individuo y su entorno familiar. La ingeniería de tejidos es un área interdisciplinaria que surge para mejorar la salud de esta área, se basa en la investigación y desarrollo de biomateriales que han evolucionado en conjunto con áreas como la biología celular, molecular y las ciencias de materiales e ingeniería. En la actualidad, la técnica se basa en la reproducción de células sobre un material polimérico prefabricado con biomateriales, entre los que encontramos a los hidrogeles, que son redes tridimensionales con propiedades hidrofílicas. Estos materiales se caracterizan por ser porosos y adheribles, favoreciendo que sirvan de soporte para la proliferación de determinadas células a fin de dirigir la regeneración del tejido lesionado. Para el uso de nuevos biomateriales en la ingeniería de tejidos es indispensable demostrar la capacidad del biomaterial de permitir el contacto con algún tejido existiendo una respuesta favorable del huésped hacia el mismo, aceptándolo como propio y restableciendo la función previamente perdida (biocompatibilidad). El primer paso para la evaluación de la biocompatibilidad son los ensayos in vitro, siendo favorables en reproducibilidad y predicción, por lo que se utilizan para producir andamios (estructura polimérica porosa) de alta calidad y para reducir u optimizar el número de pruebas a realizar en modelos animales. Esta prueba nos permite establecer los beneficios y limitaciones de los biomateriales desarrollados. En este trabajo se evaluó la biocompatibilidad de tres materiales poliméricos para demostrar su potencial para ser usados en ingeniería de tejidos por medio de pruebas de citocompatibilidad y hemocompatibilidad). Asimismo, se evaluaron técnicas de desinfección y esterilización