Resumen:
Los motivos que alientan la presente investigación son la disminución paulatina y constante de la confianza en las organizaciones gubernamentales, específicamente en la Administración Pública Federal (APF). Se toma como premisa básica que, el bajo grado de interacción e involucramiento entre diversas formas de organización y la falta de resultados eficientes a las demandas ciudadanas (por parte de la APF), ha tenido como consecuencia la disminución de confianza hacia el aparato gubernamental. Diversas encuestas califican a las instituciones y organizaciones gubernamentales mexicanas con niveles muy bajos de confianza y, en aumento. En el año 2008, las universidades, la iglesia y el ejército fueron las instituciones con mayor índice de confianza, obteniendo calificaciones de 7.9, 8 y 7.8 respectivamente;1 en contraparte parte, las que peor calificación obtuvieron fueron los diputados, la policía y los partidos políticos, 5.7, 6.1 y 5.7 respectivamente. En el mismo año 2008, la Presidencia de la República obtuvo una calificación de 6.9 misma que disminuyó para el año 2012 a 6.6 (Mitofsky, 2012).