Resumen:
La ardua labor periodística de Fernando Benítez (1912-2000) lo convirtió en un personaje insoslayable en los suplementos culturales más importantes de México1 . Incluso el escritor nunca reparó en advertir que su más grande pasión era el periodismo, profesión que también ligó a los temas históricos y la literatura, de ahí que en el ocaso de 1959, Fernando Benítez visitara al agonizante Alfonso Reyes (1889-1959), con este acto, el entonces director de México en la Cultura no sólo mostró una intención solidaria, también tenía como objetivo llevar al escritor regiomontano un ejemplar de El rey viejo2 . El obsequio resultaba significativo, ya que Reyes fue quien sugirió a Benítez escribir un libro sobre la muerte de Venustiano Carranza