Resumen:
RESUMEN
Introducción: Actualmente existen cerca de 40 millones de personas que viven con el VIH. Se
calcula que 5 millones de mujeres con VIH se embarazan cada año en los países en desarrollo
y no tienen acceso universal a los servicios de salud. México ocupa el tercer lugar de América y
el Caribe en cuanto al número absoluto de casos, después de Estados Unidos y Brasil, pero en
términos de prevalencia se ubica en el lugar 23. La tasa de transmisión perinatal en México de
1983 a 2016 es del 1.9 % para seropotividad a VIH y para los casos diagnosticados con SIDA
del 2.1 % de acuerdo con CENSIDA.
El nivel de transmisión a los hijos de mujeres seropositivas del VIH: 10% en el embarazo, 10%
durante el parto y 15% por lactancia. Las pruebas rápidas utilizadas para tamizaje para VIH,
tienen una sensibilidad de 99% y una especificidad al 98%.
Objetivo General: Conocer la incidencia de VIH en pacientes obstétricas mediante la prueba
rápida de detección en el Hospital Materno Perinatal Mónica Pretelini Sáenz de Marzo del 2013
a Noviembre del 2014.
Justificación: A pesar de que la prevalencia de VIH en mujeres embarazadas en México
todavía es baja es importante mejorar el control prenatal en la búsqueda intencionada de dicha
infección, por lo tanto es importante incorporar estrategias basadas en la normatividad nacional
para garantizar una intervención adecuada en el primer contacto. La detección temprana de la
infección por Virus de Inmunodeficiencia Humana (VIH) es la intervención de mayor efectividad
que permite implementar la terapia antirretroviral de manera oportuna, y que en la mujer
embarazada permite reducir la transmisión vertical del virus al recién nacido.
Material y Métodos: Estudio observacional, descriptivo y transversal; se realizaron pruebas
rápidas de detección para VIH a todas las pacientes embarazada que aceptaron al momento
de acudir al servicio de urgencias y consulta externa, utilizando el registro de datos en el censo
nominal en medicina preventiva.
Resultados: En base al estudio realizado la incidencia de VIH en pacientes obstétricas es del
0.003%, a pesar de los múltiples factores de riesgo para la transmisión de este virus, el número
de compañeros sexuales es el principal factor para la adquisición del mismo. Es importante
ofertar la prueba en el primer contacto con la paciente obstétrica para disminuir la transmisión
vertical ya que desafortunadamente la realización de estas se realiza mayormente en el
segundo trimestre.
Conclusiones: Aunque se pudiese considerar baja la incidencia de VIH en las pacientes
obstétricas (0.003%) debemos tomar en cuenta que la totalidad de pacientes potencialmente
expuestas es mucho mayor considerando otros servicios de atención, así como el intervalo de
tiempo, por lo que es necesario globalizar la aplicación de las pruebas rápidas y extender el
tamizaje al personal de riesgo con la finalidad de proporcionar mayor precisión en el
tratamiento y derivación de las mismas.