Resumen:
Los conflictos sociales siempre han existido, en todas las sociedades y en todas las épocas. Éstos aumentan o disminuyen de acuerdo a la percepción y aceptación tengan de la actuación de sus gobernantes, así como al estado de satisfacción de sus necesidades más apremiantes, y en muchas ocasiones, sus posibilidades de solución, dependen de la forma de reacción que adopte el Estado, que al resistir u oponerse a las movilizaciones sociales, produce el surgimiento de una nueva clase de ciudadanos más participativos y activos en las decisiones públicas.