Resumen:
A lo largo del proceso histórico, las comunidades indígenas han vivido cambios sustanciales a partir del cambio de uso de suelo, baja producción agrícola, delimitación territorial, uso irracional de los recursos naturales, penetración de empresas, lo que ha conllevado a mayor exclusión social, marginación, pobreza y migración. A pesar de estos cambios, existen colectividades que han podido dar continuidad a sus comunidades, debido al dinamismo y sus propias formas de organización y vida, siendo el territorio uno de los elementos que ha permitido la conexión con su medio, la comunalidad ha sido una perspectiva de las formas de ser de estas comunidades considerando el carácter histórico, la identidad colectiva, el territorio, el trabajo colectivo y la organización comunitaria los principales elementos en la dinámica de estas comunidades en los territorios rurales (territorio origen). Sin embargo en otro contexto la migración se ha vuelto un movimiento clave para estas comunidades, quienes van en busca de nuevas formas de vida, no sólo el medio urbano ha sido el espacio idóneo para que se empleen, sino también los destinos turísticos, donde la creciente expansión de la actividad ejerce oportunidades laborales incorporando a diversos actores de la población. Tal es el caso de Playa del Carmen, Quintana Roo, destino turístico de la Riviera maya, que se ha vuelto una fuente de empleo para comunidades de la península de Yucatán y comunidades que migran de estados vecinos como: Chiapas, Oaxaca, Tabasco y Veracruz, entre otros. Sin embargo se enfrentan a cambios en sus formas de vida, no sólo por el modo de vida de la zona urbana, sino por el cambio en sus actividades diarias.