Resumen:
El propósito del presente artículo es analizar las categorías: cuerpo, desnudez y cabellera, articuladas por la violencia simbólica en contra de las mujeres. Asimismo, se busca evidenciar el grado de “naturalización” de los estereotipos femeninos, en este caso, el uso de cabellera larga como rasgo identitario de género, cuyo manejo discrecional permite el ejercicio indiscriminado del poder masculino. Entre otros casos, se muestra el uso del yihab musulmán, por el enorme parecido al velo de monjas católicas, cuya función es, precisamente, la negación de la cabellera, impidiendo el disfrute y erotización por parte del varón. Esto, en situación contraria al de la exhibición de la desnudez y la cabellera de la mujer ante el espectador masculino, especialmente en espacios íntimos, tanto familiares como los de encuentro sexual. Para los fines de este artículo, se entiende la desnudez como una de las expresiones de la corporalidad, en este caso, femenina, que ha sido el canal de recepción u objeto para el ejercicio permanente del poder masculino, es decir, como manifestación inequívoca del orden social androcéntrico. Se plantean aquí las tres categorías de análisis entrecruzadas por el eje transversal de la violencia simbólica, aludiendo en ocasiones a referentes históricos, artísticos y semióticos.