Resumen:
Adentrarse en el ámbito de la ética, conlleva a debates con diferentes puntos de opinión, sobre todo cuando tiene relación con el gobierno, su gestión, sus funcionarios y las respuestas que se le da a la sociedad. Son muchas las inconformidades y quejas por parte de los ciudadanos, sobre todo en la deficiente atención y en la falta de soluciones a sus demandas y necesidades.
La administración pública está dedicada a las resoluciones públicas, pero como en cualquier trabajo, no se opera de forma muy excluyente con las demás ciencias, es necesario de la economía, de la arquitectura, de la contaduría, de la política, de la sociología etc., de forma tal, que se opera bajo una forma multidisciplinaria. Sin embargo, se ha olvidado –en mayor y menor grado- a la ética, la cual también va de la mano con las diferentes ciencias aplicadas, como es el caso de la medicina, el derecho, la psicología etc., pero en el campo social se le ha caracterizado como Ética Pública, Ética en la Administración Pública o Ética para la Política. Es precisamente este tema el cual lo dejan de lado los gobiernos, los políticos y funcionarios en general.
En este trabajo se da a conocer que la ética no se debe dejar de lado, ya que tiene un grado de importancia dentro y fuera de los gobiernos, lo cual refleja el deficiente funcionamiento de las instituciones públicas.
La investigación está compuesta de cuatro capítulos. En el primer capítulo, se habla del origen de la ética en la filosofía; su contenido estuvo primeramente en los autores griegos, los cuales estaban preocupados por el comportamiento del hombre en la sociedad como: Sócrates, Platón y Aristóteles, quienes se dedicaron en desarrollar y analizar este tema, también, le dieron una forma muy peculiar de distinguirla como “virtud”.