Resumen:
El agua es un recurso natural, indispensable en nuestra vida cotidiana, es el motor que mueve la vida y la economía de cualquier sociedad, tejiendo historias a lo largo de su camino. El caso del Distrito de Riego de Temascalcingo es el ejemplo de un proyecto que surge a partir de uno de los ríos más importantes de nuestro país, el río Lerma, que a lo largo de su recorrido, que comienza en el Estado de México y termina en el lago de Chapala en Jalisco, provee las aguas necesarias para el riego en el mismo.
Aunque no hay una fecha exacta de la creación de este Distrito de Riego, por algunos documentos se conoce que comenzó a operar en 1946, pero es hasta 1962 que se constituye, utilizando obras que ya existían como la presa derivadora Andaró y algunos canales de riego que se mejoraron y obras nuevas como la presa José Antonio Alzate y la presa Ignacio Ramírez, los cuales en conjunto conformaron el Distrito de Riego de Temascalcingo.
Durante años la administración, la operación y el mantenimiento de este Distrito de Riego estuvo a cargo del gobierno federal que absorbía la mayor parte de los gastos que se generaban, pero con el cambio en las políticas gubernamentales, en el año 2002 fue transferido a los usuarios, para que por medio de una Asociación Civil llamada “Sistema de Riego Temascalcingo” A. C., se hicieran cargo de la operación, conservación y administración de la infraestructura hidráulica del que en adelante y a partir de la transferencia de llamaría módulo I Temascalcingo y formaría parte junto con otros tres módulos de riego, del Distrito de Riego 033 “Estado de México”.