Resumen:
RESUMEN.
Desde la época de la Conquista en el siglo XVI, el Istmo de Tehuantepec pasó a ser una zona de interés para los españoles debido a su posición geográfica y su estrechez, sin embargo, se dieron por mejores opciones Panamá y Nicaragua, más adelante en el siglo XIX Estados Unidos de Norteamérica puso su atención en la región del Istmo, ambicionando lo mismo que los españoles y que después de la guerra contra México quiso aprovechar como moneda de cambio para que existiese la paz, en contraste ese convenio que detallaba el libre tránsito americano nunca tuvo ratificación en su senado y por ende falta de validez, años más tarde aparecieron personajes que reclamaban tener la posesión de la región como José Garay un ex funcionario mexicano que tenía la concesión para poder construir el tan anhelado paso interoceánico, sin embargo por el poco presupuesto mexicano para desarrollarlo decide ofrecerlo a compañías americanas, que se darían a conocer en 1907 cuando Porfirio Díaz desarrolla las vías ferrocarrileras e inaugura el paso por el Istmo de Tehuantepec. Ya en el siglo XXI México ha decidió retomar un proyecto que ha tenido distintos nombres, necesaria es la infraestructura ya que representa progreso y desarrollo no sin antes conocer la región Istmeña y sus características, sociales, culturales y económicas, así como lo que la implementación de las Zonas Económicas Especiales representa para su evolución. Mediante la investigación de datos y características se contrastará porque el Istmo de Tehuantepec a través del proyecto que se desarrolla es una alternativa al Canal de Panamá no dejando de lado lo que se pretende realizar a futuro por la nueva administración.