Resumen:
Durante décadas el estudio del turismo sexual, a nivel teórico y práctico, se ha
fincado en la prostitución y de ésta ha obtenido la mayoría de sus productos. No
obstante, el turismo sexual no sólo se limita a esta práctica, pues sus
configuraciones son varias y alejadas de la explotación sexual. Aún así, ésta
amplitud del turismo sexual ha sido estudiada raquíticamente por sólo un puñado
de investigadores, entre los que destacan Bauer y McKercher (2003), Ryan y Hall
(2001), y Hall (2000) quienes han tratado de esbozar en sus trabajos las formas en
las que el turismo sexual se configura y se manifiesta. Con este esfuerzo se han
sentado determinadas bases para el estudio del turismo sexual y se ha expuesto
que el turismo sexual comprende, al menos teóricamente, varias aristas del mismo
turismo y la sociedad en sí misma; sin embargo, el esfuerzo práctico para la
corroboración de tales dichos no se ha analizado ni se ha aglutinado de manera
integral. Por lo tanto este estudio trata de analizar los casos prácticos que existen
en el mundo académico que demuestran o refutan la existencia de tales
paradigmas o dimensiones.