Resumen:
Después de un largo periodo de veinte años de debate público y agitación política, en México se construye un nuevo aeropuerto internacional. El objetivo de esta presentación es analizar el proceso a través del cual se gestó la decisión política de construir el nuevo aeropuerto internacional de México y determinar el rol de la planeación territorial en la actual coyuntura. El argumento central gira en torno a la idea de que la planeación territorial tuvo un lugar marginal en la decisión, ya que sólo ha servido para justificar lo que en el terreno de lo político se ha decidido, fuera de toda pertinencia técnica, normativa y económica. A partir de una lógica deductiva se construye el marco general del análisis, al tiempo que se hace un recorrido histórico para identificar las rutas de la decisión política. Como conclusiones preliminares se atiende a lo siguiente: la ideología política fue la variable de mayor peso, por encima de consideraciones territoriales, sociales, ambientales y económicas. La decisión es una demostración de fuerza por encima de cualquier consideración técnica y de principios democráticos.
Descripción:
Las condiciones prevalecientes en el país, donde la inseguridad se ubicaba como el problema más apremiante, seguido del aumento de precios, el desempleo, la corrupción y la pobreza, dieron los elementos para la construcción de un discurso político por parte de López Obrador para posicionarse ante la opinión pública. Así, el tema de la corrupción se convirtió en su estandarte, en el que las privatizaciones se convirtieron en sinónimo de corrupción De ese modo, el viejo proyecto de Texcoco se enlistó dentro de los grandes males de la nación, ante lo cual era necesario tomar medidas radicales, donde las instituciones del Estado tuvieran el papel principal. La decisión de cambiar el proyecto aeroportuario permitió al presidente marcar distancia política con sus antecesores. Ésa fue la razón fundamental y no una visión de desarrollo territorial.