Resumen:
El uso del lenguaje inclusivo ha surgido como una respuesta a las desigualdades y exclusiones presentes en muchos idiomas; este enfoque busca eliminar los sesgos y estereotipos de género, así como otras formas de discriminación, a través de la adopción de un lenguaje más inclusivo y equitativo. Sin embargo, el impacto de este cambio lingüístico en el proceso de comunicación y principalmente en el proceso formativo a través de la educación formal, aún necesita ser explorado y comprendido en mayor profundidad.