Resumen:
Tanto el dibujo como la escritura han sido estudiados por grafólogos y psicólogos que buscan en los trazos indicios proyectivos de la personalidad del sujeto creador. Las letras que componen las palabras escritas de un discurso o la firma son, a fin de cuentas, dibujos, elementos visuales en los que queda fija la impronta de un estado de ánimo, de una experiencia concreta o de una reflexión. Sin embargo, también son signos que pueden revelar el carácter del artista, así como sus aspiraciones, fobias o filias.