Resumen:
La ilustración como mediador de comunicación, es un recurso empleado en distintos ámbitos del diseño gráfico, ya sean impresos y digitales, así, el campo de incursión que presenta desde sus inicios ha aumentado. De esta forma, la ilustración llega al ámbito cinematográfico, donde adquiere un carácter dinámico que a su vez marca una cualidad que es capaz de tener y que no precisamente se refiere al movimiento como técnica visual. Así mismo, la ilustración como parte de un proyecto de índole cinematográfica, implica también un reto para el ilustrador y/o diseñador gráfico, no solo a nivel profesional individual, sino también como parte de un equipo de trabajo. Aunado a lo anterior, y debido al papel que adquiere la ilustración, es necesario que ésta deje de ser vista como una expresión artística, y adquiera su papel de objeto de comunicación, donde el proceso de producción es ejecutado en función de objetivos, que a su vez están influidos por la intención que se quiere comunicar al espectador y la forma en como éste lo aprehende, para finalmente hacerlo tangibles. Desde esta perspectiva, este análisis con enfoque hermenéutico integra modelos y categorías de esta área aplicables al proceso de producción, dentro de las cuales, el objeto de estudio, la ilustración, es abordada como una unidad de interacción entre el autor, espectador y contexto, convirtiéndose así en un medio de acceso al conocimiento.
Descripción:
Con esta investigación, se pretende que el ilustrador y/o diseñador gráfico adquiera consciencia de sus procesos de trabajo y que si así lo requiere, replantee ese proceso a partir de los elementos y categorías expuestos a lo largo de ésta. De igual manera, derivado de esta investigación se propone al ilustrador y/o diseñador gráfico a participar en la construcción del conocimiento, en tanto que pueda considerarse a la ilustración como una disciplina más que una herramienta.